Pongamos un freno a la flacidez de la piel, con los poderes del té blanco

Distintas líneas de investigación respecto a los beneficios de los antioxidantes del té blanco, han dado como resultado, que logra un freno al deterioro progresivo de los tejidos y al envejecimiento de las células, ya que actúa como barrera frente a las distintas agresiones externas aportando elasticidad, disminuyendo posibles rojeces e irritaciones debido a su efecto antinflamatorio, además de que proporciona mayor hidratación y luminosidad en la piel.


Esta maravilla de té, conocido como el Yinzhen (agujas de plata), no es sometido a ningún procedimiento de fermentación previa. Sus flavonoides, vitaminas y sales minerales  quedan intactas. Sólo se recolecta uno o dos días al año, normalmente en primavera, y en unas condiciones un tanto particulares. Se escoge una luz sombreada, una temperatura de 18º C y se va recogiendo el primer brote de las ramas más tiernas. Posteriormente se realiza la selección definitiva de las yemas, llegando solo a aprovecharse 3 kilos de una recolecta de 25. Su tiempo de secado puede llegar a prolongarse hasta tres días.

Usando este maravilloso regalo de la naturaleza, no solo podemos evitar la flacidez de la piel, sino además ayuda a mejorar las defensas y colabora combatiendo los radicales libres. Protege contra las caries dentales por su alto componente de flúor. Combate la fatiga física y mental, aumenta la capacidad de concentración y memoria. Es ideal en dietas ya que no tiene calorías, aumenta la energía, es suavemente diurético y favorece la eliminación de grasas. Es un excelente aliado ante enfermedades cardiovasculares ya que baja los niveles de colesterol “malo” (LDL) y triglicéridos.

Prepara tu piel para la temporada de verano… Vive la magia de la primavera, sonríe y lucirás radiante, ayudándote a proyectar TU MEJOR IMAGEN.